Personal investigador del CIBER del área de Enfermedades Raras (CIBERER) ha estudiado sobre la posible aplicación de este medicamento huérfano para el tratamiento de la aciduria glutárica, que se han limitado hasta ahora a modelos animales de la enfermedad. Este estudio ha sido desarrollado por el grupo liderado por Cristina Fillat, investigadora principal del CIBERER, en el IDIBAPS de Barcelona.
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha designado un vector viral adenoasociado (AAV-GCDH) como medicamento huérfano para el tratamiento de la aciduria glutárica, un trastorno del metabolismo de la lisina, que causa la acumulación en plasma, orina y tejidos de unos productos tóxicos, el ácido glutárico y sus derivados, provocando convulsiones, irritabilidad, hipotonía, dificultades en la alimentación y la presencia de movimientos involuntarios llamados distónicos o coreicos.
Es una enfermedad potencialmente mortal y crónicamente debilitante debido a lesiones neurológicas irreversibles durante estas crisis encefalopáticas en la infancia. El pronóstico puede ser muy grave y condicionar una pérdida de las adquisiciones motrices del paciente.
El medicamento huérfano AAV-GCDH es capaz de controlar los niveles de metabolitos tóxicos evitando las principales alteraciones neuropatológicas y mantiene la supervivencia a largo plazo de los ratones modelos de la enfermedad.
La aciduria glutárica es una enfermedad metabólica de herencia autosómica recesiva y carácter progresivo debido al déficit de la enzima glutaril-CoA-deshidrogenasa (GCDH). La deficiencia enzimática provoca niveles excesivos de los productos intermedios de degradación de la lisina, estos se acumulan en sangre y orina, y principalmente en el núcleo estriado.
La aciduria glutárica se calcula que afecta aproximadamente a 0,2 de cada 10.000 personas en la Unión Europea. Esta afección ocasiona alteraciones neurológicas asociadas a lesiones irreversibles en la región estriatal y trastornos del movimiento, que acaban siendo inhabilitantes para los pacientes. El debut clínico de la enfermedad se da principalmente entre los 3 y 36 meses de edad, iniciándose con una crisis encefalopática aguda (CEA) que surge de un evento precipitante como un episodio de fiebre, infecciones o ayuno, entre otros.
La aciduria glutárica se puede detectar de forma precoz puesto que se encuentra incluida en el Programa de Cribado Neonatal de muchos países. Sin embargo, actualmente no existe tratamiento curativo alguno para la enfermedad. La única opción terapéutica es una dieta preventiva, basada principalmente en una restricción dietética de lisina y suplementación con carnitina, así como con la prevención del catabolismo en momentos críticos. De esta forma se consigue prevenir la aparición del daño estriatal en dos tercios de los pacientes, pero a pesar de mantener una buena adherencia a la dieta, todavía existe un número significativo de pacientes que desarrollan crisis encefalopáticas, dando lugar a alteraciones psicomotoras graves y permanentes.
CIBERER ha promovido con esta nueva designación ya 18 medicamentos huérfanos por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), 6 de los cuales también han sido designados como tales por la agencia americana (FDA).8 de estos medicamentos corresponden a terapia génica y los otros 10 son reposicionamientos, es decir, fármacos que ya se utilizan para otras patologías que están siendo evaluados para su uso en alguna enfermedad rara. Beneficios de la designación como medicamento huérfano.
La designación como medicamento huérfano por parte de la EMA tiene ventajas como la de recibir una autorización de comercialización durante 10 años en los que no pueden comercializarse productos similares, el poder disponer de protocolos de asistencia y consejo científico gratuitos o con un coste reducido, y la exención de pagos para la designación. Además, las entidades que desarrollan medicamentos huérfanos tienen acceso a subvenciones específicas de la UE y de los programas de los estados miembros.